sábado, enero 18, 2014

Sobre un papiro de ondulante eternidad

Cuerdas de amor y vida
como alas libres sin el verbo
que las amarre,
se posan jubilosas sobre un papiro
de ondulante eternidad.

Sonidos del latido que celebran
sorprendidos, el hallazgo del numen
-aria de las musas-,
en el secreto edén de las caracolas.

Aire musical que llama a la sacra empatía,
a la luz de inmanencias fusionadas
donde en metáforas de voz,
sobre las aguas del azul y de la espuma,
se entona la apasionada figura
de un verso de amor.




Homo Viator






Homo viator por caminos y ciudades amuralladas.
Doble itinerario: el de mis pies con ojos históricos,
y el de mi espíritu para asir el vuelo medieval.

Peregrina en las romerías que besan
Mantos de Virgen y cánticos de sol.

Rosales rendidos al embrujo de amor
susurrante, en las voces y el arte de los trovadores
y minnesänger.

Ángeles que acompañan el ritmo
del rabel, el salterio y el laúd.

Amanecen alas de gardenias
en los claustros de los monjes.

Inscrita en una piedra escolástica
la Revelación Divina , hermanada
al Magister dixit.

Contemplación.
Ora et labora benedictina.
Amor cortés.

Homo viator,
- fascinada y permeable al misterio
del Santo Grial-,
internada en los bosques, pergaminos
y vitrales de la Edad Medieval.



viernes, enero 03, 2014

La Verdad










Sobre  estas piedras alisadas por el beso de los vientos,
respiré  la angustia y el pavor
de ver escurrirse la verdad entre mis dedos.

¿Estaría en la verdad o el acierto
al perseguir el sueño
de ser gaviota posada en la playa de un olvido?
Temblor primero.
¡No me quiero!

¿Sería justo que la erijamos como absoluto
en tertulias filosóficas
con el fin de gozar las delicias
efímeras de un triunfo?

Temblor segundo.
Nada es nuestro, ni siquiera el atisbo de lucidez
para pensarla.

La verdad reina por sí misma.
Hallada o confiscada,
es bastión incorruptible en medio de tormentas.
Se eleva como estrella diamantina
-el iris del alma puede verla-
en un perpetuo vals de oboes trascendentes.