viernes, agosto 24, 2012

Peregrinos...

Arco de soles.

Invitación de los astros al peregrinar del alma por los bosques lumínicos de las verdades ulteriores, disolviendo junto a ellas las propias sombras. Fascinante viaje que tiene un retorno: volver con más transparencia a la matriz de la divina estrella.


Escalar, caer y retomar el sendero, avanzando en la medida en que aprendemos de la vida, sus secretos y lecciones. Leer en el violín del viento los signos de nuestro ahora, interpretando los celestes mensajes cuya voz y caricia, son perceptibles sólo en las auroras.

Estar despiertos para dilucidar sin premura, nuestro propio mapa de viajeros.

Llorar lo que pudimos haber sido y por miedo, no fuimos. No llorar aquello imposible por ajeno a nuestro destino. O llorarlo en parte a solas, en el claustro de nuestros versos, lienzos, pentagramas.

Sonreír, aún cuando la tarde de lo incomprensible sea una paradoja. Porque el humor tiene matices divinos.

Y amar como el mar ama la orilla, como el ser cuando desnudo en gloria y vanidades- siendo íntegro en su esencia- ama por entero a su igual: otro peregrino.





sábado, agosto 18, 2012

Cincel del corazón

Labra la inspiración tu nombre
en danza de estrella.
Cincel del corazón aún enamorado
que te evoca.

Asciende en espiral la remembranza
de paisajes diamantinos,
-inmortal lumbre
que custodia las caricias y los besos-.

¡Tan de los dos también el aire
del verso naciente
en la fuente de susurros!

Labra la inspiración tu nombre
que navega por mis venas,
ríos de lavandas.

Y mi voz se vuelve nido
de cielo en espera.